Hace ya muchos años, cuando era niña, una vecina me dió un ganchillo y un pequeño ovillo de lana verde y me enseñó a hacer cadenetas para que me entretuviera; éra verano y claro no había colegio, así que allí estaba yo entusiasmada con el ganchillo y el ovillo haciendo cadenetas y formando una especie de red; cuando se acababa la lana lo desacía y volvía a empezar,mi entusiasmo éra tal que me bajaba la labor a la calle y hacía y deshacía cadenetas en lugar de jugar con las amigas.
Cuando estaba recién casada me volvió a picar el gusanillo del ganchillo y compré un ovillo de algoón de color tostado y un ganchillo y me puse manos a la obra a intentar hacer un tapete sin tener la más mínima idea de cómo hacerlo, había visto uno en el escaparate de una tienda de lanas y todo éra fijarme y que no había manera, bueno al final conseguí hacer un tapete, pero por supuesto no el del escaparate y todavía lo conservo como recuerdo:
UNA ANTIGÜEDAD |
Al poco tiempo tomé una sabia decisión : comprarme una revista de Labores del Hogar. Fué maravilloso, ya podía hacer cosas de ganchillo, allí había explicaciones y modelos y por fín conseguí hacer un tapete de ganchillo que para mí por supuesto éra el más bonito del mundo:
Tengo mucho que agradecer a la revistar Labores del Hogar ya que con ella he aprendido muchas cosas y he tenido la oportunidad y el placer de hacer un montón de labores.
Pues el que hiciste sola te quedó muy bonito...!!!
ResponderEliminarEl otro también es precioso!
Bss
preciosos ahora a seguir haciendo un saludo maria,
ResponderEliminarHoola Aris!! yo tambien soy de las que compraban Labores del hogar, y tambien guardo labores de esos tiempos y estas revistas! aisssss que recuerdos me has transmitido con ésta entrada,y el tapete una preciosida el mas bonito del mundo!! claro que si!!
ResponderEliminarun abrazo